En un país que a menudo logra calificaciones altas en términos de confianza en las noticias, los modelos de negocios digitales ya no son sólo una herramienta para diversificar ingresos. Se han transformado en fundamentales para la supervivencia. En 2020 las preocupaciones por la pandemia parecen haber desempeñado un papel para que más gente estuviera dispuesta a pagar por contenido digital.

El impacto del COVID-19 se sumó a los problemas estructurales de larga duración en los medios portugueses, que arrastraban una caída en los ingresos de los productos impresos y de la publicidad, y un fracaso para reemplazarlos con nuevos modelos de negocio digitales. 

Los analistas estiman que en 2020 el coronavirus redujo los beneficios por publicidad entre un 40% y un 50%, y la pandemia impactó en todos los aspectos de la industria. La tirada de las ediciones impresas cayó casi un 20% en el primer trimestre y nuestros datos muestran que las ediciones impresas como fuentes de información disminuyeron seis puntos porcentuales con respecto a 2020. 

Al principio las audiencias televisivas se incrementaron debido a la inquietud por el COVID-19 y a la presencia de una mayor cantidad de gente en sus hogares. Pero la radio fue golpeada por el colapso de las escuchas de quienes antes iban y volvían de sus lugares de trabajo, y eso privó a las emisoras de sus espacios publicitarios más rentables. Se produjeron pérdidas de empleos: una proporción significativa de los periodistas portugueses fueron despedidos o experimentaron recortes salariales en 2020.¹ La empresa Global Media Group, propietaria de marcas como Diário de Notícias, Jornal de Notícias y la radio TSF, atravesó una reestructuración radical en abril de 2020, con 538 despidos transitorios.

La buena noticia es que los números del sector muestran un incremento en la cantidad de gente que paga por la información online, aunque se parte de una base baja. El impulso que el COVID-19 ha dado a las suscripciones digitales de noticias fue resaltado por el APCT [la entidad que mide las cifras del sector],² por los datos de las encuestas del Digital News Report y por el centro de investigaciones OberCom.³ Expresso informó un crecimiento de las suscripciones digitales del 53% en 2020, mientras que en Público crecieron un 97%. De todos modos, por lo general los medios no han incrementado sus ingresos digitales lo suficientemente rápido para equilibrar las pérdidas significativas de sus tiradas impresas, de las cuales todavía depende la mayoría.

Una inusual forma de apoyo llegó por parte de Santa Casa da Misericórdia, la institución social que, entre otras cosas, gestiona la lotería Euromillions. Esa institución lanzó una iniciativa para financiar 20.000 suscripciones gratuitas para ocho medios (siete generalistas y uno deportivo). Las marcas utilizaron esa ayuda de distintas maneras: la revista semanal Visão regaló algunas suscripciones a adultos mayores que estudiaban en la Universidad de la Tercera Edad, mientras que Público apuntó a personas desempleadas.

Otra reacción, aunque controvertida, fue el esquema de asistencia financiera de emergencia por el COVID-19 que creó el Gobierno portugués en la primavera boreal de 2020, para compensar la pérdida estimada de ingresos debido a la cancelación de la publicidad corporativa. Para medios nacionales hubo 11,25 millones de euros; a nivel regional y local se repartieron 3,75 millones de euros. El debate se planteó en torno al enfoque oficial y a los montos otorgados a cada marca.

El aumento de la desinformación relacionada con el coronavirus ha inquietado a legisladores y medios. OberCom⁴ y el MediaLab de ISCTE-IUL ⁵ han reportado cómo se ha ido diseminando la desinformación en aplicaciones privadas de mensajería como WhatsApp y utilizando perfiles que imitaban a las fuentes genuinas de noticias para llegar a amplias audiencias en redes sociales. Al principio varios medios levantaron sus muros de pago para el contenido clave sobre COVID-19 y por primera vez las organizaciones de verificación asumieron protagonismo en el ciclo diario de noticias. Polígrafo y Observador, las dos principales entidades nacionales de verificación, lograron espacios en horarios centrales de los canales SIC y TVI TV.

Pese a la pandemia, 2020 tuvo algunos desarrollos estratégicos importantes. La televisión privada SIC lanzó el primer servicio de streaming privado del país, denominado OPTO, en tanto que la emisora pública RTP invirtió una considerable cantidad de recursos para expandir su servicio gratuito de streaming, RTP Play. Diário de Notícias, uno de los periódicos más antiguos de Portugal, recuperó la edición impresa diaria, tras haberla abandonado en junio de 2018 por una edición semanal en combinación con la presencia cotidiana digital.

Medios independientes más pequeños como Fumaça, Mapa, Shifter, Divergente o Interruptor continúan innovando tanto en las prácticas periodísticas como en los modelos de negocio. Por lo general, apuntan a construir sostenibilidad a largo plazo mediante una relación mucho más cercana e íntima con sus audiencias y la financiación a menudo proviene de una mezcla de aportes colectivos (crowdfunding) y de fundaciones. El paisaje regional de los medios también va cambiando, con nuevos proyectos en desarrollo mientras crecen sin pausas marcas existentes como Medio Tejo y Sul Informação.

Ana Pinto-Martinho, Miguel Paisana y Gustavo Cardoso
del Instituto Universitario ISCTE-IUL de Lisboa. 

Medios cambiantes

La pandemia aceleró las tendencias a la baja en los productos impresos, en tanto que la TV y los espacios online (incluyendo las redes sociales) mostraron pocos cambios con respecto al año pasado. El teléfono inteligente se transformó en la forma de acceso predominante, a pesar de la reducción en la movilidad.

La confianza en las noticias permanece alta en el ecosistema mediático de Portugal, incluso en un contexto donde creció incesantemente la desinformación vinculada al coronavirus, especialmente en las redes sociales. La emisora pública RTP se mantiene como el medio más confiable, mientras que se registra menos confianza en la marca Correio da Manhã, que cuenta con operaciones impresa, televisiva y online.

Notas al pie

¹ https://www.ics.ulisboa.pt/docs/covid19/RelatorioCOVID19Jornalismo.pdf

² http://www.apct.pt/

³ Los datos del Digital News Report también muestran una subida sustancial en las suscripciones digitales este año. Sin embargo, es necesario señalar que la cifra de 17% probablemente sobreestime la cantidad total de suscriptores, ya que los encuestados mencionan varios tipos de pagos digitales para acceder a contenido informativo en el ámbito online, vía celular, en TV y radio. Es decir, no se trata solamente de suscripciones a medios.

⁴ https://obercom.pt/pandemia-e-consumos-mediaticos/

⁵ https://medialab.iscte-iul.pt/information-and-misinformation-coronavirus-in-portugal/